No es solo publicar por publicar: cómo crear contenido estratégico si eres nutricionista

No es solo publicar por publicar: cómo crear contenido estratégico si eres nutricionista

5/17/20252 min read

No es solo publicar por publicar: cómo crear contenido estratégico si eres nutricionista

Estás en redes sociales, publicas cada tanto, compartes recetas, frases motivacionales, algunos mitos... pero los pacientes no llegan.

Si esto te suena familiar, probablemente tu contenido no esté alineado con una estrategia clara.

Y en el mundo actual, el contenido es mucho más que una herramienta de visibilidad: es tu carta de presentación, tu embudo de conversión y tu posicionamiento profesional.

¿Qué es contenido estratégico?

Es aquel contenido que no solo educa o entretiene, sino que está pensado con un objetivo concreto: atraer al paciente ideal, generar confianza y guiarlo hasta la consulta o servicio que ofreces.

Un contenido estratégico:

  • Habla de los problemas reales que tiene tu paciente ideal.

  • Ofrece micro soluciones o tips aplicables.

  • Posiciona tu experiencia sin necesidad de “venderte”.

  • Alinea cada publicación con tus servicios o enfoque.

El error más común: hablar de todo para todos

Muchos nutricionistas sienten que deben demostrar que saben de todo: alimentación infantil, suplementación, patologías, deporte, recetas…
Y eso, lejos de posicionarte, diluye tu mensaje.

Recuerda: quien habla para todos, no conecta con nadie.

Por eso, el primer paso es tener claro a quién le estás hablando (tu nicho o segmento) y luego construir contenido enfocado en sus dudas, barreras y objetivos.

Tipología de contenidos para nutricionistas

Si estás comenzando, puedes ordenar tu contenido en 4 tipos:

  1. Educativo: explica conceptos clave, corrige errores comunes, entrega valor.

  2. Inspiracional: comparte historias, frases, testimonios, evolución de pacientes.

  3. Conexión: muestra tu lado humano, tu historia, tu propósito como profesional.

  4. Promocional: invita a tu consulta, explica tus servicios, lanza un descuento o agenda abierta.

Cada uno cumple una función distinta y, al combinarlos, se genera una estrategia más equilibrada que educa, conecta y convierte.

¿Qué temas puedes abordar?

Todo dependerá de tu nicho. Pero algunos ejemplos:

  • Si atiendes mujeres con resistencia a la insulina: errores comunes al intentar bajar el azúcar, cómo interpretar una curva de insulina, diferencias entre SOP y resistencia, etc.

  • Si trabajas con pacientes renales: cómo leer etiquetas para controlar fósforo, snacks bajos en sodio, importancia del control proteico, etc.

La clave es que el contenido resuelva preguntas reales y frecuentes.